Edición 2021
Bases
Bases de la segunda convocatoria
La Propiedad del Teatro Romea convoca la segunda edición del Premi Teresa Cunillé al mejor estudio sobre la historia del teatro en catalán. La convocatoria tiene carácter bienal.
Este premio surge de una iniciativa conjunta de la actriz Teresa Cunillé y la Propiedad del Teatro Romea. Su finalidad es incentivar y apoyar la investigación sobre la historia del teatro catalán. Define una temática específica para cada convocatoria, de manera que se puedan ir tratando diferentes periodos y temáticas que, por diferentes motivos, aún no han sido objeto de estudio por parte de la historiografía.
El premio cuenta con el apoyo del Centre de Documentació del Museu de les Arts Escèniques del Institut del Teatre de Barcelona. Este centro pone a disposición de los investigadores diversos fondos documentales que recogen fotografías, carteles, críticas y otros materiales sobre el tema de la convocatoria. Por otra parte, la propiedad del teatro Romea dispone de un fondo de consulta de prensa, desde 1967 hasta 1988, que podrá ser consultado en el mismo teatro.
Temática
En esta convocatoria el premio se ofrece al mejor trabajo en el ámbito del teatro catalán contemporáneo.
Requisitos
Pueden aspirar a este premio los estudiosos, investigadores y personas competentes en la historia de las artes escénicas.
Los trabajos, redactados en catalán, deberán ser originales e inéditos y deberán tener un máximo de ciento cincuenta páginas en formato ISO A4, con un interlineado de un espacio y medio.
Calendario
El plazo para entregar los trabajos era el día 4 de julio de 2021, aniversario de la muerte de Frederic Soler 'Pitarra'.
Sin embargo, de manera excepcional y debido a la situación que hemos vivido este último año, hemos decidido alargar el plazo de presentación hasta el día 20 de octubre.
El jurado hará público su veredicto el día 18 de noviembre de 2021, aniversario de la inauguración del Teatro Romea, el año 1863.
Entrega de trabajos
Las candidaturas al premio deberán ser presentadas telemáticamente a través del formulario de la página web (https://www.teatreromeapropietat.cat/ca/premi-teresa- Cunillé) en el que podrán adjuntar el trabajo en PDF o Word (máximo 8 Mb). Si el trabajo supera los 8 Mb, se podrá enviar como documento adjunto en un correo electrónico a la dirección Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., antes del día 4 de julio. No se aceptará ningún trabajo recibido fuera de plazo o que no cumpla los requisitos establecidos.
Jurado
El jurado estará formado por las siguientes personas: Sra. Laura Cendrós, representante de la Propiedad del Teatro Romea, como presidenta.
Actuarán como vocales los Sres. Enric Ciurans, profesor de artes escénicas de la Universitat de Barcelona; Narcís Comadira, escritor y traductor; Francesc Foguet, profesor de Estudios Teatrales de la Universitat Autònoma de Barcelona; Enric Gallén, profesor de Literatura Catalana de la Universitat Pompeu Fabra; y Albert Mestres, escritor y profesor del Institut del Teatre de Barcelona.
La Sra. Araceli Vilarrasa, representante de la familia Vilarrasa-Cunillé, como secretaria. El jurado queda facultado para interpretar las bases, para resolver cualquier incidencia y también se reserva el derecho de no adjudicar el premio. Su decisión será inapelable.
Dotación
La dotación del premio es de 4.000 euros. La persona premiada recibirá, además, un diploma acreditativo.
El trabajo premiado será difundido en edición digital en el RedIT (reservorio digital del Institut del Teatre) y podrá optar a ser publicado en edición papel dentro de las colecciones del servicio de publicaciones de la misma institución. Los autores/as mantendrán la propiedad del trabajo.
Temática
En esta segunda convocatoria el premio se ofrece al mejor trabajo en el ámbito del teatro catalán contemporáneo.
Requisitos
Pueden aspirar a este premio los estudiosos e investigadores en la búsqueda de las artes escénicas.
Los trabajos, redactados en catalán, deberán ser originales e inéditos y deberán tener un máximo de ciento cincuenta páginas en formato ISO A4, con un interlineado de un espacio y medio.
Calendario
El plazo inicial para entregar los trabajos era el día 4 de julio de 2021, aniversario de la muerte de Frederic Soler 'Pitarra'.
Sin embargo, de forma excepcional y, debido a la situación que hemos vivido este último año, hemos decidido alargar el plazo de presentación hasta el día 20 de octubre.
El jurado hará público su veredicto el día 18 de noviembre de 2021, aniversario de la inauguración del Teatre Romea, en 1863.
Entrega de trabajos
Las candidaturas al premio se tendrán que presentar telemáticamente mediante el formulario de la página web (https://www.teatreromeapropietat.cat/ca/premi-teresa-cunille), en el que podrán adjuntar el trabajo en PDF o Word (máximo 8 Mb). Si el trabajo supera los 8 Mb, deberá ser enviado como adjunto en un correo electrónico a la dirección Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., antes del día 20 de octubre.
No se aceptará ningún trabajo recibido fuero de plazo o que no cumpla con los requisitos establecidos.
Jurado
El jurado estará formado por las siguientes personas:
Como presidenta, Laura Cendrós, representante de la Propiedad del Teatro Romea.
Como vocales, Enric Ciurans, profesor y director del departamento de historia de la Universidad de Barcelona; Narcís Comadira, escritor y traductor; Francesc Foguet, coordinador del Máster Universitario en Estudios Teatrales de la Universidad Autónoma de Barcelona; Enric Gallén, profesor de Literatura Catalana de la Universidad Pompeu Fabra; y Albert Mestres, escritor y profesor del Instituto del Teatro de Barcelona.
Y como secretaria, Araceli Vilarrasa, representante de la familia Vilarrasa-Cunillé.
El Jurado queda facultado para interpretar las bases, para resolver cualquier incidencia y también se reserva el derecho de no adjudicar el premio. Su decisión será inapelable.
Dotación
La dotación del premio es de 4.000 euros. La persona premiada recibirá, además, un diploma acreditativo.
El trabajo premiado será difundido en edición digital alRedit (Reservorio digital del Instituto) y podrá optar a ser publicado en edición papel dentro de las colecciones del servicio de publicaciones del Instituto del Teatro. Los autores/as mantendrán la propiedad del trabajo.
Exposición
El Centro de Documentación del Museu de les Arts Escèniques (DMAE) de l'Institut del Teatre organizará una exposición sobre la temática del trabajo ganador, en la cual los autores galardonados podrán ser invitados a participar en el comisariado.
Veredicto
El día 25 de octubre el Jurado decide otorgar el Premio TERESA CUNILLÉ en su segunda convocatoria, al trabajo Vuit paròdies del teatre d'Àngel Guimerà. Text y context teatral, de Joan Martori, trabajo que considera merecedor del Premio por el hecho de aportar con calidad y rigor un nuevo conocimiento al contexto teatral en el que se produjo la obra de Àngel Guimerà, nuestro autor más reconocido a nivel internacional y sobre el que el autor ya ha trabajado anteriormente.
Asimismo, el jurado destaca la labor de búsqueda y el rescate de textos originales de algunas de las parodias, que estaban prácticamente desaparecidos.
Joan Martori lleva muchos años dedicado a investigar, "con calidad y rigor", el contexto teatral en el que se produjo la obra de Àngel Guimerà. La búsqueda laboriosa y persistente le ha llevado a rescatar una serie de textos originales de algunas de las parodias de las obras de Guimerà, que estaban prácticamente desaparecidas.
Joan Martori es licenciado en Filología Catalana por la Universidad de Barcelona y Graduado en Teoría y Crítica del Teatro por el Institut del Teatre y la Universidad Autònoma de Barcelona. Ha dedicado muchos años a la enseñanza de la lengua y la literatura en institutos de educación secundaria. Actualmente, colabora en el Proyecto de Investigación en Artes Escénicas Catalanas que promueve el Institut del Teatre y en el Grupo de Estudios de Literatura Catalana Contemporánea de la UAB. Es autor de una obra de referencia de los estudios guimeranianos: "La proyección de Àngel Guimerà en Madrid (1891-1924)". En estos momentos está centrado en trabajos sobre la presencia de la obra de Guimerà en el cine y el teatro iberoamericanos y, también, en la edición de las piezas dramáticas de Ignasi Iglésias.
A continuación reproducimos el discurso que realizó el ganador en recibir el premio:
Bon vespre a tothom,
És un honor per mi haver rebut aquest premi de mans de Teresa Cunillé. I en el Teatre Romea, un espai tan emblèmàtic en la història del teatre de la ciutat de Barcelona.
En nom de totes i tots els que ens dediquem a la investigació de la història del teatre, vull agrair que la Propietat del Teatre Romea, amb la col·laboració de la Fundació Romea, l'Institut del Teatre i la
família Vilarrasa-Cunillé, convoqui aquest premi. A més a més vull expressar el meu agraïment a tots els components del jurat per haver confiat en el meu treball. I al públic, per haver assistit a la
celebració d'aquest acte.
Escriure és una cosa molt seriosa. I fer-ho en català suposa que aquesta serietat sovint es decanti cap a la gravetat. Si s'escriu amb rigor, és clar. Escriure en català comporta adoptar un compromís amb
la llengua i amb el públic lector. En els temps que corren cal anar amb peus de plom, però. Segons què s'hi digui i com es digui, el text pot ser intervingut per la Guàrdia Civil i acabar essent comentat
a la sala penal del Tribunal Supremo. Poca broma!
¿S'imaginen vostès per uns moments que Joan Maragall després d'escriure “La vaca cega” pengés el text en el seu web amb un enllaç del recitat del poema de Maria Morera i en demanés que es cliqués
el “m'agrada”? ¿O que Salvador Espriu enviés l'eborrany de “La pell de brau” al seu grup de uatzap, en el qual hi hauria persones tan significatives com Ricard Salvat i Maria Aurèlia Capmany, amb un
comentari final que digués “passa-ho”? No crec que ni Joan Oliver, amagat darrere del pseudònim de Pere Quart, fes coses semblants després d'escriure “Vaca suïssa”, una paròdia del poema de
Maragall, que, entre altres coses, és un al·legat a favor de la feminitat contra tota mena d'explotació i maltractament, també sexual. Per aquest motiu aquesta bèstia poètica, tan singular com rebel,
s'autoproclama com la vaca de la mala llet. En un moment ecaient, el 1937, tan adient com ho segueix essent ara. Ni penso tampoc que Pere Quart hagués enviat la seva respectuosa paròdia
d'”Assaig de càntic en el temple” d'Espriu, que porta per títol “Assaig de plagi a la taverna”, un cant d'amor dolorós cap a aquesta “bruta, trista i dissortada pàtria”, amb l'emoticona de la cara riallera, la
de la cara torta, de més intensitat emocional, o amb un comentari final que digués “em peto”.
Afegir-hi emoticones o comentaris d'aquesta mena no hagués fet per un escriptor tan seriós com Oliver per més astracanades que hagués dut a terme amb els seus amics de la Colla de Sabadell.
Una persona pot cargolar-se, esqueixar-se, esbotzar-se, desllorigar-se, petar-se, desfer-se, i pixar-se de riure. Fins i tot es pot riure pels colzes i per les butxaques. Morir-se de riure ja no és tan
recomanable, al menys en el sentit literal. Ara bé tots aquests actes vistosos i sonors, que formen part del catàleg dels plaers humans més comuns i generalitzats, per no dir democràtics, com
assenyala el teòric de l'humor Terry Eagleton, es produeixen en un terreny vedat per a papes i generals. Quan aquestes màximes autoritats escriuen encícliques i ordres militars el decòrum
exigible a les seves responsabilitats no els permet, de cap de les maneres, que esclafin a riure i encara menys que es petin el cul. En tot cas poden riure per sota el nas, que és com riure pels seus
dintres, sempre i quan no se'ls vegi. Uns condicionants que tampoc escapen a la vida pública dels governants. Que jo sàpiga no es conserva cap document visual en el qual es pugui veure a Donald
Trump clavant-se a riure. Ni tampoc del seu homòleg de Corea del sud Kim Jong-un. Segurament en ambdós casos per por a despentinar-se.
Riure, principalment quan es fa amb ganes, pot comportar la pèrdua del control del propi cos. Per aquesta raó es considera un acte molt perillós des d'un punt de vista polític. Com passa amb els
paquets de cigarretes elaborats pel monopoli tabaquer de l'Estat potser algun any el volum en el qual es publiquen els pressupostos generals, en els quals s'inclouen les partides destinades a la
cultura, s'acompanyin d'una faixa que digui “Riure mata”.
Els confesso que en més d'una ocasió en escriure el meu treball sobre les paròdies del teatre de Guimerà, l'autor més parodiat de la història del teatre català -ara ja ho sabem-, he escrit i rigut
alhora en transcriure els fragments de les paròdies.
La meva filla, una vegada em va veure escrivint davant del portàtil en l'extrem de la taula del menjador -és on millor treballo, més de gust que al despatx-, em va veure escriure i petant-me de
riure al mateix temps. Dissimuladament, la Clàudia va mirar la pantalla i se li va posar una cara de sorpresa difícil de descriure. Potser l'emoticona aquella que tant s'assembla al crit de Munch ens
ajudaria a entendre millor el que tracto d'explicar.
Ella sap que el seu pare fa temps que pateix una addició, la de la investigació, una addició que fins al moment no ha estat reconeguda per la Organització Mundial de la Salut. Sap que treballar en el
món de les humanitats, de la literatura i, més concretament, de la història del teatre, s'ha covertit com més va en una feina similar a la que fa un arqueòleg sufocat per la calor enmig del desert.
Hauran vist a la televisió que els arqueòlegs fan els descobriments més espectaculars durant l'estiu, en temps de vacances, com els filòlegs. Però ells ho fan vestits amb salacot, pantalons curts, mitjons
blancs i botes Panama Jack, una indumèntaria molt adequada per als reportatges. Als filòlegs i als historiadors, com que no estem tan sotmesos a les inclemències de la intempèrie, se'ns permet
treballar en calçotets, sempre que això no afecti l'ordre familiar i disposem d'internet a casa.
Per altra banda, l'Elena, la meva dona, que també és a la sala per acompanyar-me en la celebració d'aquest acte, és una persona que ha tingut la santa paciència de llegir en veu alta més d'un text
paròdic. Quan li ho he demanat per allò que fem els filòlegs de repassar i revisar els textos fins a l'extenuació. Les lectures en veu alta de la meva dona en més d'una ocasió s'han vist salpebrades
amb unes riallades compartides, nascudes dels propis textos de les paròdies. Si d'entrada la dicció de l'Elena em permetia vèncer la sensació de solitud que suposa la redacció d'un treball d'aquesta
mena, per altra banda, compartir el seu riure m'omplia de satisfacció. Diuen els experts, entre els quals es troben Freud i Lacan, que riure plegats és un signe de salut emocional, que afavoreix la
perdurabilitat d'un matrimoni de llarga durada com ho és el nostre.
No em vull endisar més en aquest terreny. No tot son flors i violes en aquesta qüestió que comento. En aquest punt em ve a la ment més d'un episodi crític en el qual, emocionat pels resultats de la
redacció, havent sopat, he proposat a la meva filla i a la meva dona de llegir-los en veu alta algun fragment del treball. Estoicament han acceptat escoltar-me. Forma part de la manera d'estimar-nos a
casa nostra. Mentre llegia, però, he alçat la mirada de la pantalla i les he enxampat amb una pancarta que deia: “una altra vegada?” M'hauran de disculpar, però no he trobat cap emoticona que
pugui substituir aquesta patètica situació.
En els casos de Maragall, Espriu i Pere Quart, per més que ens esforcem a atansar la seva obra cap a l'actualitat, els exemples dels comentaris i les emoticones esdevenen una absurda contradicció en
els termes. Però en les paròdies, sí que es produeix una situació paradoxal, que es mou entre l'humor i la seriositat, però en sentit contrari, en un viatge que aniria de la comicitat a la seriositat.
De les dues paròdies que coneixem de Terra baixa, Riera baixa situa l'acció en la Barcelona de finals del XIX i es va escriure a correcuita. Després d'estrenar-se la versió catalana de Terra baixa
en aquesta casa, la paròdia es posava en escena immediatament, també aquí, per treure ferro a un cert malestar dels sectors del públic que no entenien que Guimerà hagués donat a conèixer la seva
obra a la capital d'Espanya abans que a Barcelona.
Tierra baja...da, la paròdia argentina, va ser una de les conseqüències de l'impacte de l'obra de Guimerà en el teatre i el cinema argentins. És un simpàtic mirall, si és que els miralls poden ser
simpàtics després del de Blancaneus, dels xocs culturals derivats del fenomen de les migracions italianes que des de mitjans del XIX estaven posant en tensió el sentiment nacional a l'Argentina.
Arran dels motius que les han originat o per la funció que tenen, aquestes joies de l'humor esdevenen un homenatge a l'autoritat de Guimerà i a la important significació de la seva obra que,
en el cas de Riera baixa, es verbalitza en escena. Des d'aquest punt de vista aquestes peces poden entendre's com a paròdies serioses, per més contradictori i paradoxal que pugui semblar.
Per acabar m'agradaria compartir amb tots vostès la veu del personatge de Manelic, transformat en l'Embolic de Riera baixa, una paròdia urbana que, com La taverna del Ninot, l'acció de la qual es
desenvolupa a la taverna que donà nom al mercat de l'actual barri de l'Eixample, evoluciona al compàs de la vida urbana de les classes populars d'aquell temps. També em complauria que
sentissin la veu de Melonic, el gautxo argentí que paroditza el pastor de Guimerà.
Per aquest motiu porto a la butxaca una còpia d'alguns fragments de les dues paròdies. Que consti que no sempre ho faig. Les he portat com una deferència cap a vostès per si algú del públic s'avenís
a llegir-los i compartir entre tots la gràcia que tenen. Només caldria posar-se en situació en la Barcelona d'aquell temps i en la pell d'un gautxo de l'Argentina...
Hi ha alguna persona del públic que es vegi amb cor de pujar a l'escenari i llegir-los en veu alta?
Aixequin la mà, si us plau.
(Es tria “aquell senyor d'allà” assegut a la fila 5 de la platea. Puja a l'escenari l'actor Bruno Oro que llegirà els fragments dels epidodis d'”El somni de Manelic” i de “La moneda” de les paròdies Riera
baixa i Tierra baja...da, respectivament).
Acto de entrega del Premio
Ha sido en el Teatre Romea el 29 de noviembre, a las 19.00 h.
En el acto, conducido por Carla Mercader, han intervenido Fèlix Riera, director de la Fundación Romea; Laura Cendròs, miembro del consejo directivo de la Propiedad del teatro y presidenta del jurado; Enric Ciurans, profesor y director del departamento de Historia de la Universidad de Barcelona que, como portavoz del jurado, ha glosado la obra premiada; y la propia Teresa Cunillé.
El punto final lo ha puesto el actor Bruno Oro, que se ha ofrecido desde la platea a leer unos textos de Guimerà interpretando las voces de Manelic, Melonic y Manelic Gauxo.
Fotografías del acto de entrega